Símbolo único del triunfo del espíritu humano sobre la adversidad y la injusticia. Con 500 años de antigüedad, representa una parte importantísima de la historia de Ciudad del Cabo y Sudáfrica en general. Una infame prisión que fue utilizada para leprosos, delincuentes y presos políticos. Nelson Mandela pasó 18 años preso en Robben Island, para luego regresar a tierra firme y convertirse en el presidente de Sudáfrica.